miércoles, 15 de agosto de 2012

Hay un camino, ¿cuál?




Henrique Capriles Radonski (HCR) trazó que siempre HAY UN CAMINO, y ahora mucho más. Acá destacamos puntos esenciales del esperanzador camino, convertido en realidad desde enero de 2013, ya siendo HCR el nuevo Presidente de la República, si así lo resuelve el mandato popular del próximo 7 de octubre próximo. Veamos esos puntos, para mí esenciales: · Eficiencia y anticorrupción gubernamental, sin sectarismos, ni personalismos y sin abusos, con sentido amplio de equipo.

Cumplimiento de los mandatos legales sobre corrupción en el caso de los servidores públicos, cuyo número uno es el Presidente.

· La paz interna y externa, dentro de un proceso de reconciliación y hacia la más amplia unidad nacional en toda la República.

· La lucha política y social con adversarios y no enemigos como actores. Derecho pleno a la agrupación política, sindical, gremial, empresarial y social, sin intromisión gubernamental.

Respetuosa y cordial relación entre las organizaciones contrarias.

· Estabilidad laboral y libertad política de los servidores públicos, sin acoso ni presión gubernamental para comprometerlos.

· Derecho pleno de todos los trabajadores (manuales e intelectuales, del campo y de la ciudad) en su vida
de asociación, en todas sus contrataciones con los diversos tipos de patronos, · Instrumentación práctica de un mecanismo de evaluación objetivo y continuo del cumplimiento de los mandatos constitucionales, legales y reglamentarios, en relación con los funcionarios públicos, empezando por el Presidente de la República.
· Gobernar a diario para una Democracia Integral (en lo político, económico, social y ético-moral), con ocupación prioritaria a las personas de toda Venezuela más necesitadas. Sin marca política-ideológica comprometida. Con una estrategia económica que se mantenga dinámica y acorde con la línea general, donde la economía y la política anden juntas.

· Respetar y ejecutar los mandatos internacionales y resguardar debidamente la institucionalidad establecida, empezando por las organizaciones de derechos humanos.

· Renovar y profesionalizar la diplomacia venezolana y hacerla inmune a los vaivenes políticos internos, sin aislamientos ni amarres políticos.

· Respetar debidamente el juego democrático al cual debieran servir todos los medios de comunicación social, en función de la libertad de pensamiento y expresión.

· Restablecer los principios y valores de la institucionalidad de la FAN, consagrados en la propia Constitución. Descartar en ello cualquier injerencia extraña.

· Asumir, con buena orientación, prontitud y eficiencia la gravísima situación de nuestras cárceles.

· Dar a la seguridad en su sentido integral (personal, jurídica, social...) la requerida prioridad, junto con el empleo, la educación, la salud, el deporte, entre otras áreas.

· Línea gubernamental a fondo para combatir debidamente la violencia, el miedo, la resignación y otros trastornos potenciales y reales de la salud integral de los venezolanos.

Extraido de  http://www.talcualdigital.com/Nota/visor.aspx?id=74804&tipo=AVA

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